Última jornada de esta segunda parte liguera, en la cual el equipo tenía muchas ganas de mejorar el partido de la semana pasada y así fue. Fue un claro ejemplo de que este equipo nunca se rinde, nos pusimos por detrás hasta en dos ocasiones y aún así conseguimos igualar el marcador en ambas ocasiones. Nos supo a victoria por el trabajo que desempeño el equipo y es un orgullo ser el entrenar de todos estos jugadores y jugadoras.

Aarón fue importantísimo en la meta, salvando al equipo y saliendo sin ningún miedo, hizo paradas de verdadero porterazo.
En defensa David, Miguel y Pablo fueron verdaderos cerrojos para el equipo, metieron el pie y el cuerpo sin ningún miramiento, y además sacaban el balón con criterio y buenos pases.
Como alas Marcos, Adrián y Hugo fueron transcendentales para el equipo, dando esa fuerza y ese físico de subida y bajada que nos hacía falta.
En ataque Gonzalo y Samuel estuvieron eléctricos, ningún rival era capaz de pararlos, además del trabajo ofensivo eran los primeros en bajar y recuperar balones.

Ponemos fin a esta liga con la gran recompensa de haber crecido una inmensidad como grupo y futbolísticamente.
¡Siempre con el Padilla!