El viernes fue un partido bonito. Un derby. Un padilla contra padilla. Lo disfrutamos mucho y sonreímos más.

Marcamos y lo celebramos como si fuese un gran gol en una noche de Champions League.

También lo vivimos con una enorme ilusión y con una actitud tan grande como son nuestros pequeños/as.

Quiero hacer mención especial a nuestra portera Álex que después de algunos partidos y muchos goles, no ha perdido la ilusión y ha demostrado en un solo día que es una porteraza. Con salidas increíbles, con paradones de uno contra uno y con una fuerza inusitada para su tamaño.

Aquí quien quiere probar de portero y disfrutar de la portería lo hace, quien quiere ser pívot también puede y quien quiere tirarse por el suelo durante el partido también. Porque esto es para disfrutar y ser felices.

Y en eso que estamos viviendo la emoción del fútbol, seguimos aprendiendo día a día valores como el compañerismo o la empatía.

Un abrazo familias.

Os deseo las mejores de las fiestas posibles.

Un abrazo.

Ramón.