El partido estuvo súper disputado, primeramente el partido empezó con 4 jugadores de ellos, pero que mostraban muchas ganas y un gran dominio del balón. Por momentos parecía que el equipo con menos jugadores podría ganar el partido por las ganas que pusieron, pero el Maestro Padilla quiso cambiarlo.

El partido fue un gran proceso de situaciones disputadas, pases, grandes recuperaciones, muchas acciones en campo rival y… muchísimos goles. Un partido que acabó con 10 goles al descanso y de los cuales 4 se marcaron en menos de 5 minutos, resultado 5-5. Difícil encontrar un partido tan igualado en el que, esa primera parte, se resolvía con rachas de goles de un equipo y luego de otro. Fue una buena primera parte, donde ellos aparecieron a un nivel muy alto y que, en su mayoría, resolvía de manera individual para conseguir anotar los goles. Nosotros, a través de buenas acciones nos acercábamos a la portería rival, pero nos costaba llegar al gol… pero hacer las cosas bien siempre tiene su recompensa. Sergio Linos, para mi destacado durante todo lo que jugó, dio varias asistencias antes del descanso para conseguir el empate, además de marcar goles. Fue genial ver la cantidad de acciones buenas que realizó para dejar a sus compañeros delante del portero y que pudieran tener ocasión de meter gol, ¡fantástica tu generosidad con los compañeros!

La segunda parte del partido tuvo la misma tónica e igualdad, con menos goles, pero con mucha tensión.
Las ocasiones se sucedían para ambos equipos y, de manera bastante seguida, los goles también. Ambos equipos luchaban por conseguir marcar, si un equipo marcaba uno, el otro conseguía meter 2 y el otro equipo volvía a responder igualando el marcador de tal forma que el partido llegó a los últimos 5 minutos con el resultado igualado 7-7 y ya quedaba muy poco para tratar de resolverlo. Con insitencia, ganas y algo de fortuna el Maestro Padilla consiguió meter un gol más y llevarse el partido por 8-7. Que locura, alegría y emoción… tanta fue la euforia que hubo un accidental choque y Sergio se llevó un golpe que finalmente quedó en susto. El pobre Sergio se llevó goles, asistencias, el reconocimiento y cariño de sus compañeros y una buena herida en la cabeza. Menos mal que está bien.

Enhorabuena a todos los que participaron en el partido Matías, Josías, Jorge, Eva, Javi, Sergio, Diego, Mario García, Mario Pulido, Asier, Hugo Marina y Pietro. Espero que todos los asistentes al partido lo hayáis disfrutado mucho, nosotros lo hicimos. Nos vemos en el próximo partido.